Imbroda plantea una Ley de Inclusión y potenciar y extender el Bachillerato Internacional y el bilingüismo

El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, ha anunciado este jueves su intención de impulsar una Ley andaluza de Inclusión Educativa, así como de potenciar el Bachillerato Internacional y de extender el bilingüismo por los centros andaluces.

 

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El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, ha anunciado este jueves su intención de impulsar una Ley andaluza de Inclusión Educativa, así como de potenciar el Bachillerato Internacional y de extender el bilingüismo por los centros andaluces.

Han sido algunas de las líneas de actuación que se ha fijado en su primera comparecencia en comisión parlamentaria, junto a otras como promover el «reconocimiento de la autoridad del profesorado» o el ya anunciado programa de refuerzo educativo y deportivo que se va a implantar en julio.

Imbroda pretende crear una «red andaluza de Bachillerato Internacional» y que «haya al menos un centro» con ese modelo «en cada provincia andaluza», teniendo en cuenta que actualmente en Andalucía sólo está en el instituto ‘Martínez Montañés’ de Sevilla, según ha explicado.

 

 

Además, ha anunciado la creación de «un equipo de trabajo» pilotado por su Consejería junto a las de Empleo y Economía «para dar empleabilidad a los alumnos de Formación Profesional (FP)», así como la «ampliación progresiva del primer ciclo infantil de cero a tres años, garantizando su gratuidad a las familias con menos recursos».

Respecto al bilingüismo, el consejero ha señalado su aspiración a que «llegue a toda la red educativa», y a que los alumnos andaluces «salgan del bachillerato o un ciclo formativo superior con el nivel C1» en segundo idioma.

También ha apostado por «introducir en el currículum conceptos empresariales, de emprendimiento, conceptos financieros», así como por un «plan general de inspección» y un «plan de mejora de instalaciones y servicios complementarios».

En materia deportiva, el consejero se ha comprometido a fomentar «los valores del deporte», que tienen «transversalidad en todas las facetas de la vida», a introducir el deporte «en categorías de formación», a apoyar el deporte femenino, el de personas con discapacidad y el deporte como «activo turístico», además del deporte profesional, que «arrastra a mucha gente».

En su primera intervención, el consejero ha agradecido la labor del «equipo saliente» de la Consejería y ha explicado que ha dedicado sus primeros días en el cargo a formar a su propio equipo, atender «asuntos urgentes» que había sobre la mesa y a escuchar a colectivos como sindicatos, la patronal de la concertada, asociaciones, inspectores o monitoras.

 

 

«DESPOLITIZAR LA EDUCACIÓN»

Imbroda se ha definido como «un docente de profesión y vocación» que viene «con la sana intención de despolitizar la educación», en la que cree como «un bien supremo de la sociedad», y ha dicho que se plantea «qué podemos hacer entre todos para mejorar la formación de nuestros niños y jóvenes, para que nuestros docentes estén lo mejor preparados posibles», que apuesta por una administración «ágil, abierta, digitalizada», así como por «introducir la actividad física y deportiva y los hábitos saludables desde edades tempranas hasta la edad adulta».

Según ha abundado, le gustaría compartir estos principios «con toda la comunidad educativa, comenzando» por el Parlamento, y se ha puesto «de aquí a final de curso» como plazo «para que este debate tenga respuestas».

Por lo demás, Imbroda ha citado «fortalezas» del sistema educativo andaluz como que «atiende a casi dos millones de alumnos, casi el 20% total del alumnado español», ha destacado el esfuerzo de su personal docente y no docente, del personal funcionario y técnico, de los inspectores, y ha resaltado que «el acceso y la cobertura educativa a nuestros niños y jóvenes es de las más completas a nivel nacional».

Junto a esas fortalezas ha citado «carencias» como el «intolerable abandono escolar del 23,5%», con el que Andalucía se sitúa a la cabeza entre las regiones europeas, según ha lamentado, haciendo hincapié en que «el objetivo europeo fijado por la Comisión Europea para 2020 es que esa tasa esté por debajo del 10 por ciento».

 

 

Además, ha llamado a «mejorar la calidad del sistema y apostar por la excelencia», punto en el que ha citado el informe Pisa pero relativizando su importancia, porque «no es muy convencido» del mismo, y ha reivindicado la «inversión» en educación, y al respecto ha lamentado que Andalucía es «la segunda comunidad que menos invierte por alumno».

También ha apostado por la mejora de infraestructuras educativas y por la FP, así como por que el sistema educativo dé «respuesta a los nuevos hábitos de niños y jóvenes, que han cambiado».

Sobre el número de plazas de la oferta de empleo público, ha reiterado que «serán más de 3.000 para que se cubran todas las necesidades», si bien «los técnicos están afinando» la cifra exacta, y ha apostado también por «cubrir las bajas» de profesores «lo antes posible», porque «no concibe que nuestros niños estén un solo día sin profesor».

Imbroda se ha definido como «un convencido de lo público y de la libertad» y ha concluido su intervención inicial indicando que «partimos de una situación complicada», pero expresando su deseo de construir, «entre todos, una mejor educación».

PSOE-A RUEGA A IMBRODA QUE «PROTEJA LA EDUCACIÓN PÚBLICA»

En el turno de los grupos, la parlamentaria del PSOE-A María Márquez ha reconocido «buenas palabras» en el discurso de Imbroda, ha valorado su «tono» y las iniciativas de una Ley de Inclusión y otra de FP, pero ha criticado que Educación no sea objeto de una consejería exclusiva en el Gobierno, que se haya «eliminado» la Agencia de Evaluación Educativa (Agaeve), o que la Consejería se haya «olvidado de unas 1.000 plazas» en la propuesta de oferta de empleo público docente presentada a los sindicatos, y ha concluido rogándole que «proteja la educación pública».

 

 

Por su parte, el diputado del PP-A Miguel Ángel Ruiz ha expresado la coincidencia de su grupo con los «principios, análisis y líneas de actuación» propuestos por el consejero, pero ha avisado de que el nuevo Ejecutivo recibe «una herencia difícil» de la anterior administración socialista. Ha apostado por lograr «un gran pacto educativo» en pos de la «estabilidad» del sistema, y ha defendido que «una apuesta firme y decidida por la educación pública no está reñida con el apoyo a la educación concertada».

En nombre de Ciudadanos (Cs), la diputada María del Mar Sánchez ha llamado a «trabajar por la calidad de todo el sistema de educación», y al respecto ha recordado que hay diferentes informes, no sólo el PISA, que «coinciden en que Andalucía está por debajo de España, y España por debajo de la media de la Unión Europea» en esta materia. Ha aludido también a las «altas tasas de desempleo juvenil», ha abogado por «fomentar la FP» y se ha referido al estado de las infraestructuras educativas como otra cuestión a priorizar.

Por Adelante Andalucía, José Ignacio García ha reivindicado la educación pública «de calidad», así como que sea «inclusiva», ha abogado por «plantear suelos» obligatorios de inversión en educación y ha anunciado que su grupo volverá a presentar esta legislatura su iniciativa para la bioclimatización de las aulas. Además, ha pedido al consejero que «no dé hueco a los fanáticos» en relación al diseño de un «currículum educativo feminista, que tenga claro la lucha contra la violencia machista y contra la ‘lgtbifobia'».

 

 

Finalmente, el diputado de Vox Rafael Segovia ha trasladado al consejero el compromiso de su grupo de ser «colaborador leal para llevar adelante» las propuestas desgranadas en un discurso que ha juzgado «muy completo y acertado». Junto a ello, ha reivindicado «la libertad de los padres» para escoger el modelo de enseñanza y el centro para sus hijos, el llamado ‘pin parental’ o una propuesta de «cheque escolar por cada alumno», así como ha pedido «evitar cualquier injerencia de los poderes públicos en la formación ideológica de los alumnos».