Noticias

¿Vos sabés qué es el voseo?

Los principales datos de un rasgo del habla popular que caracterizan el uso de la lengua española en nuestro país y la distinguen de la “lengua madre”. 

 

lavoz.com.ar

“¿Me dices la hora?” o “¿Me decís la hora?”

Si hiciéramos una selfie al modo en que hablamos el español o castellano en Argentina, deberíamos hacer foco en el voseo. Pero, ¿qué es el voseo? En Argentina tratamos al otro, al que va dirigido el mensaje, como vos: “¿Me decís la hora?”, o como usted: “¿Me dice la hora?”, dependiendo de la relación o la distancia percibida respecto del receptor. Pero definitivamente no lo tratamos de tú: “¿Me dices la hora?”. Entonces, definimos el voseo como el uso del vos (en lugar del tuteo o uso del tú) para referir a la segunda persona de singular en el trato informal. Por ejemplo, cuando hablamos con un amigo, le podríamos decir algo así:

La marca de nuestra identidad lingüística 

El voseo es el rasgo morfosintáctico más importante de la identidad lingüística argentina. Fenómeno generalizado en todo el territorio nacional, conforma la lengua estándar en las dimensiones diastrática (en todas las clases sociales y niveles culturales), diatópica (todas las regiones del país) y diafásica (todos los contextos comunicativos).

El uso extendido del vos ha logrado imponerse totalmente sobre el uso del tú, y en gran medida también sobre la forma cortés usted. Esto último se debe, en parte, a que en nuestro país tiende a no emplearse el lenguaje con función separatista, es decir, para diferenciar entre clases sociales, jerarquías de poder, niveles de autoridad, sexo o edad, sino que más bien marca la mayor o menor confianza entre los interlocutores. Es importante aclarar que, además de estar extendido en todo el territorio nacional, son voseantes (es decir, usan el vos) todas las clases sociales y grupos generacionales argentinos. Sin embargo, no siempre fueron así las cosas…

Nació en cuna de oro; hoy, vive en todos los hogares argentinos…

El origen del voseo se remonta al siglo IV y era la fórmula de tratamiento de extremo respeto que se usaba con el emperador romano. Se trataba de un uso del pronombre y/o las formas verbales de segunda persona del plural con valor del singular. Con el tiempo, su uso se extendió a otros sectores superiores de la sociedad, en los que el empleo del vos era expresión de respeto y formalidad para referirse a alguien de rango superior (“Su alteza, vos tenéis…”).

En el siglo XVI, cuando los españoles conquistaron América, usaban el vos para el trato formal (similar al usted actual) y el tú para el trato informal. En ese momento apareció la forma vuestra merced (luego, usted) y el vos pasó a usarse con el mismo significado que el tú. Hoy, dos tercios del mundo que habla español utiliza el tú, y el otro tercio, el vos. El voseo se utiliza sólo en América: en toda la Argentina (donde es de uso culto y general), y en regiones de países como Paraguay, Uruguay, Bolivia, Chile, Ecuador, Colombia, Venezuela, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua.

En la escuela no se lo enseñaba…

En 1891, el Consejo Nacional de Educación comenzó a editar la revista El Monitor de la Educación Común. Su director fue Domingo F. Sarmiento y allí se volcaban las opiniones sobre las políticas públicas en educación. Se evidenciaba la preocupación oficial por el “cultivo del idioma”. Una de las dificultades identificadas era la “descomposición del idioma” por la convivencia de distintas lenguas producto de las inmigraciones. Las familias llegadas desde otros países eran consideradas una dificultad para las escuelas, que debían combatir la “barbarie” personificada en distintos idiomas.La utilización de la lengua culta tenía dos objetivos: reafirmar la nacionalidad de los nativos y establecerla entre los extranjeros-inmigrantes, convirtiéndose así en símbolo de distinción y  pertenencia. Se adoptó el español de Castilla como lengua oficial. En las escuelas, la asignatura se denominó “Castellano”, para no dejar dudas de la importancia de la norma culta que España había impuesto durante años.

El voseo, rasgo identitario

Durante mucho tiempo, el voseo fue combatido por autoridades y académicos. Sin embargo, su uso por parte de los hablantes terminó por imponerse.

En la escuela no se lo enseñaba…

La negación a utilizar el voseo fue una clara medida para homogeneizar la lengua de una población que recibía los aportes (no muy bien vistos para la misión de la enseñanza pública), de las lenguas que llegaban desde Europa: se lo debía erradicar de las escuelas. En un acta confeccionada por un inspector de la época, y citada en El Monitor, este aseguraba: “Al visitar algunas escuelas, he hallado maestros que decían a los alumnos: sentate o parate. Este defecto debió ser corregido hace tiempo. El maestro tiene plena libertad para dirigirse al alumno empleando el pronombre tú o usted, pero debe hablar siempre en castellano” (julio de 1909, Nº 439). Más que claro para ejemplificar la postura de las autoridades, por un lado, y la fuerza de la lengua que se utilizaba cotidianamente, por otro.

Es llamativo que aún hoy circulan por nuestras aulas consignas que se dirigen a los estudiantes con un “tú tácito” que perdura, ya tal vez no con el objetivo claro de difundir o imponer una variedad de la lengua por sobre otras, pero sin dudas es un vestigio de aquella época que pervive en la reproducción de prácticas escolares a través de los años.

Por lo tanto, el desafío de los actores que interactúan en las instituciones educativas es rescatar, evidenciar y valorar el voseo como rasgo distintivo de nuestra lengua.

Pero el voseo resistió y avanzó…

Si bien el voseo se hallaba arraigado en el lenguaje hablado, llama la atención que hasta la década del ‘30 los usuarios al escribir reemplazaran el vos por el tú, incluso en la redacción de cartas íntimas o familiares. En el cine, la radio y la televisión el tuteo siguió siendo la norma hasta los años ‘40. En contraposición, el género teatral, quizá debido a la verosimilitud que requiere la construcción de sus diálogos, logró un importante avance en la imposición del uso real que hacían las personas de la época.

Es interesante el caso de la historieta de vanguardia El Eternauta, que aparece hacia fines de los ‘50. Sus personajes no se voseaban y en sus viñetas podía observarse una situación tan rioplatense como una partida de truco entre amigos y a la vez leer el siguiente parlamento: “Al cuerno con la radio, a ti te toca dar, Juan.”

Ya durante la década del ’60 la utilización del voseo se extendió luego al periodismo (no sólo en los temas más informales, sino también en los suplementos literarios), la publicidad, los discursos de los actos oficiales y los sermones religiosos.

Evitar los modismos que desvirtúan y son tan comunes en el decir corriente, como «salí», «andá», etcétera, decían los documentos oficiales. 

…y en la radio se lo censuraba

A principios del siglo 20, toda la gente en Buenos Aires usaba el vos para hablar en su vida diaria: se había convertido en un rasgo estándar en la oralidad. Sin embargo, era considerado por los hablantes cultos puristas como un vicio del lenguaje, porque no era lo que se usaba en España y en otros países de América. En los años ’30-‘40, durante la llamada “Década Infame” y cuando el medio de comunicación por excelencia era la radio, el Estado buscó regular el uso de la lengua en la radiofonía argentina con el fin de disciplinar a las masas populares y migratorias. Uno de los rasgos censurados fue el voseo.

Entre 1934 y 1946 se creó una serie de circulares e instrucciones que debían ser aplicadas en la radio, aunque no fueron siempre llevadas a la práctica. En principio, se reprimió el uso del “rioplatense” y el voseo fue vinculado con el mal gusto y la desfiguración e incorrecta dicción del castellano. El documento de 1934 se oponía completamente al voseo, aun admitiendo que era de uso común: “En todas las transmisiones, sin excepción alguna, debe cuidarse con rigurosa escrupulosidad una absoluta corrección en el empleo del idioma castellano, evitando los modismos que desvirtúan y son tan comunes en el decir corriente, como “salí”, “andá”, etc.”

El voseo estaba asociado con el lenguaje familiar, ¿cuál era la preocupación del momento? Que la norma lingüística enseñada en las escuelas era la del habla culta de Castilla y no era aconsejable que la radio conspirara en contra de esa instrucción.

Luego, en 1946, se publica el Manual de Instrucciones de Radiodifusión, en el cual el voseo no era tampoco tolerado y se lo consideraba “una desfiguración sistémica del idioma nacional”.

 … y al final, ¡ganó por nocaut!

Finalmente, en 1982 y después de diversas polémicas, la Academia Argentina de Letras le otorgó al vos la legitimidad que le faltaba y lo incluyó en la norma culta o lengua estándar argentina, ¡y se convirtió oficialmente en sello de argentinidad!.

Material producido por estudiantes y profesores de los Profesorados de Lengua y Literatura, de gestión estatal y privada, de la Dirección General de Educación Superior del Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba, en el marco de acciones Rumbo al VIII Congreso Internacional de la Lengua Española; septiembre – diciembre 2018. Docentes: Florencia Ávalos y Lucas Cedriani. Estudiantes: Diego Curatella, Irene Tomás, Verónica Méndez, Daiana Jara, Silvia Villarreal, Lucas López, Daniel Lucero.

1 comments on “¿Vos sabés qué es el voseo?

  1. Giselda Bazán

    En Costa Rica también se utiliza el voseo, el puro.

    Me gusta

Deja un comentario